Fornalutx

Uno de los pueblos más bonitos de España

Rodeado de bancales de limoneros y naranjos, encontramos este pequeño pueblo de montaña. Situado cerca de la población de Sóller, su historia ha estado siempre ligada a la de la ciudad vecina, ya que hasta 1813 formaron un único término municipal. 

El pueblo cuenta con varios reconocimientos a nivel nacional debido a las labores de conservación y protección del paisaje. Uno de los más recientes fue en 2017, cuando fue considerado como uno de los pueblos más bonitos de España. Los habitantes de este lugar se esfuerzan por mantener el estilo y el ambiente de antaño, con sus casas de piedra y calles empedradas. 

Entre los elementos de interés destaca la antigua almazara de Can Xoroi. En ella hay una exposición permanente de tejas pintadas. Las tejas se pintaban a pie de obra, con dibujos geométricos, motivos vegetales, escenas religiosas o de la vida cotidiana y figuras zoomórficas. Este arte popular y la costumbre de ornamentar los voladizos se extendió durante el siglo XVI, siendo Sóller y Fornalutx donde se conserva el mayor número de edificios con tejas pintadas.

Al estar en plena Serra de Tramuntana, Fornalutx ofrece numerosas rutas y excursiones, como el Camí de s’Alzina Fumadora, el de Binibassí, el de sa Costera y el des Creuer.

Fornalutx dispone de varios alojamientos de carácter más familiar para aquellos que deseen unas vacaciones tranquilas. Varios cafés y restaurantes (alguno de comida tradicional mallorquina) están a disposición de los visitantes que decidan acercarse a este lugar. 

Acceder al pueblo puede resultar a veces complicado. Las calles son estrechas y en algunos momentos puede haber bastante tráfico. En las dos entradas del pueblo hay aparcamiento regulado a disposición de los visitantes.